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martes, 16 de agosto de 2011

¡Cuidemos el Planeta que Dios nos dio!

Antes de empezar con la entrada, veamos cómo Dios creó este planeta, y qué opinaba al respecto:
“Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. Y llamó Dios a la expansión Cielos.” (Génesis 1:6-7) 


Diferencia Entre Felicidad y Gozo

La felicidad depende de las circunstancias que nos suceden, y es por esa razón que nos volvemos esclavos de  ellas. Porque debemos reconocer que las circunstancias a veces no son buenas. Es en este momento cuando necesitamos gozo, la felicidad depende de las circunstancias, el gozo depende del Señor, debemos regocijarnos en el Señor siempre, y la razón es porque Él nunca cambia a diferencia de las circunstancias.
¿Cómo debemos tener plenitud de gozo?
Muchas veces buscamos en lugares equivocados, a muchos nos pasa eso, una vez buscaba las llaves de mi motocicleta pero no las hallaba por ningún lado, busque en mis pantalones sucios, en mi mochila, debajo de la cama, moví muebles pesados para saber si estaban debajo, pero no las hallaba, hasta que mi hermana menor las busco detenidamente en el lugar donde siempre las dejo (yo no lo había hecho bien, solo pase de “re- ojo”) resulta que estaba en el lugar de siempre, debajo de una cinta.


Dios te Conoce, te Llama y te Ama.


Todos hemos pasado por la experiencia de ser los “nuevos” en algún lugar. Esto pudo haber sido en tu trabajo, en tu iglesia, en tu escuela, en tu equipo, etc. Lo primero que hacemos es presentarnos, y decir nuestro nombre. Algunos tenemos uno que es fácil de recordar, sin embargo hay otros que se nos hacen más difíciles (producto de unos padres muy imaginativos).
A medida que pasa el tiempo, vas conociendo a las personas, y al conocerlas, vas recordando más cada vez sus gustos, sus facetas y sus gestos.